Desnuda

Luchaba con fuerza para no ser agredida. Un golpe en la cabeza la dejo aturdida y a la vez mansa para él. Y comenzó con su acto despreciable.

Jamás quiso que él tocara su piel directamente. Se sentía sucia. Sentía asco al sentir sus manos sobre su carne totalmente desnuda. Sentía un maldito mareo que no la dejaba actuar.

Calor sobre su cuerpo. Su carne la sentía como jamás lo imagino. Solo 2 minutos y medio bastaron para acabar con ella. Para dejarla totalmente desnuda. Para despojarle la vida, de su esencia.

Ahora solo observaba sin nada que hacer. Muerta. Y ahí estaba frente a ella el hombre que le quito la piel.